martes, 8 de abril de 2014

ABANDONADO

Seguro que así se siente mi blog.
Hace días que no te visito y es que... no tengo muchas ganas.
Será que mi disposición es más a contar satisfacciones, alegrías, emociones positivas ... y últimamente me siento más bien un poquito triste.
Yo estoy bien, sí, voy recuperando mi vida cotidiana con cosillas varias, según la oncóloga efectos secundarios de los tratamientos, pero todo dentro de un proceso normal.
Estoy muy triste por mi mami, ¡pobre! cada día está peor. Las noticias del neurólogo no son muy esperanzadoras y, aunque me resigno, a ratitos la tristeza me invade como una sombra. Además la preocupación por cómo organizar aquella casa para hacérselo más llevadero a mi padre es un continuo. 
Toda su vida cuidando, toda su vida sufriendo, pendiente de los demás, hasta que su cuerpo ha dicho: "ya no puedo más".
El único consuelo es pensar en darle mucho cariño y que se sienta cuidada. No hay otra.
Podría estar disfrutando de mi recuperación de otra forma, pero la "sombra" no me deja.
Además, lo considero injusto, no se lo merece. Ella debería haber podido disfrutar de mi curación mucho más intensamente, de sus nietas, de  la vida...
¿Por qué hay determinadas personas que se les ha vetado el derecho a vivir con tranquilidad, a disfrutar de las pequeñas cosas, a sentir el sol de primavera con la satisfacción de sentirse bien, a sentirse feliz...?
De nuevo un intenso ejercicio de adecuar tu actitud a una realidad que no se puede cambiar.
A veces me canso.
Será que es imposible SER FELIZ, quizá debemos luchar por conseguir MOMENTOS DE FELICIDAD Y ESTAR FELIZ.
No os asustéis, voy a seguir intentándolo. Acabo de leer que el primer paso es sentirse bien con una misma, será verdad...
¡A propósito! Hoy hace un año de mi baja laboral y mañana de mi primera operación.
¡¡¡1 AÑO!!!!